¿De dónde vienen las prendas que vestimos? Hoy la mayoría vienen de fabricas industriales con grandes maquinas, robots y en muchas ocasiones trabajadores que casi parecen esclavos. Antes era un oficio en el que plantas y animales como por magia, renacián en prendas que nos protegían de los elementos y aparecían en la mayoría de los rituales. Parte de esos saberes siguen entre nosotros, cuidados por nuestras madres y abuelas, esperando un aprendiz que quiera continuarlo.
Estamos rescatando una tradición artesanal de nuestros ancestros Guane, para que en un futuro nuestros hijos y la gente que quiera aprender pueda seguir con los trabajos del lienzo y no dejar terminar este trabajo tan importante y especial para nosotros
Somos gente del campo colombiano, específicamente del territorio del Alto Río Fonce al sur de Santander (Charalá, Coromoro, Onzaga, Gámbita y Encino) y estamos en la zona que habitaba la tribu Chalalá de la etnia Guane. Aunque ya nuestros indígenas no están, somos los mestizos que heredamos estas tierra y queremos honrar su memoria cuidando la naturaleza con técnicas limpias y con semillas libres.
La laboriosa tarea de alistar el algodón para realizar prendas de lienzo, empieza por quitar la semilla de cada copo sin dañar la fibra, no usamos maquinas automáticas y por eso nuestros hilos son finos y únicos, no vas a ver ningún hilo que se parezca a otro, cada uno tiene la huella de las maestras hilanderas.
¿Sabías que el tinturado de ropa es una de las actividades más contaminantes que realizamos los seres humanos? Pues, nuestros ancestros no contaminaban, ellos usaban cortezas, cáscaras y hojas de las plantas para tinturar sin usar productos dañinos para la naturaleza y nuestra salud, por el contrario aprovechar de forma sustentable estas materias promueve el cuidado de los bosques.
El tejido es una actividad que ha estado en todas las culturas a lo largo de la historia nos ha vestido, adornado, cuidado y conectado. Nuestra forma de tejer es una mezcla entre la forma que sabian nuestros indígenas desde que llegaron a América hace más de 10.000 años, las técnicas que trajeron los españoles hace más de 500 años y que ellos aprendieron de Asia. El tejido social nos une, ninguna cultura es dueña de la historia ni está sola, todas tenemos algo por aprender y enseñar.
Parece magia, pero hay mucha ciencia y experiencia en la forma en que los copos de algodón se transforman en hilo que pueden formar una ruana, unos zapatos y hasta resistentes hamacas, todo girando un huso de madera con un tortero, herramienta que viene desde la Edad de Piedra y ha llegado hasta el presente con pocos cambios, siendo todavía funcional y muy interesante de ver y usar.
La cebolla cabezona o Allium cepa es famosa por hacernos llorar, pero acá te enseñamos una técnica para alegrarte el día, que puedes probar por tu cuenta. Pues te contamos que usando esta verdura hortaliza, que encontramos facilmente en las cocinas de nuestras casas, podemos tinturar las prendas con una linda gama de tonos color amarillo.
Tejer en telar horizontal se acerca mucho a interpretar música, mientras el diseño de las puntadas se parece a las partituras, el telar funciona como un instrumento de percusión que con habilidad y ritmo nos permiten entrar en un estado hipnótico en el que nos olvidamos de las preocupaciones mientras nos concentramos en pintar con hilos y sonidos.
Casi se pierde el algodón mestizo porque fuimos olvidando nuestras tradiciones y las industrias prefieren el algodón egipcio con técnicas que hacen mucho daño a los ecosistemas. Nosotros estamos recuperando la siembra de esta especie y con cuidado, sin veneno, un poco de agua, luz, abono y cariño podemos tener una mata de algodón en nuestras casas. Algunos de los productos de nuestra tienda vienen con una semilla para que pruebes sembrarla
¿Qué inspira lo que vestimos y lo que diseñamos? La respuesta está en lo que nos rodea, un territorio muy pacífico, solidario y con una gran biodiversidad.
Hay muchas fuentes de fibras naturales para hacer ropa, canastos, empaques, papeles y hasta casas. Nosotros usamos algodón, pero de acuerdo a cada clima y región hay muchas opciones tanto animales (lana de oveja, alpaca, cuero, pieles :(, cachemir y seda), como vegetales (fique o cáctus, palma, liana, coco, ceiba, hojas y cortezas de muchas plantas).
Nuestra comunidad tiene muy claro que el dinero no es lo más importante y comunidades de muchas otras culturas también lo saben, hay cosas más importantes como la familia, los amigos, los ecosistemas, el paisaje, en general la vida y el cosmos. El dinero es tan solo una herramienta de intercambio y para nosotros el intercambio debe ser justo, la economía solidaria y el trabajo cooperativo. Cuando compras productos de una comunidad artesanal, puedes confiar con que estás aportando a una sociedad más equitativa y a una mejor calidad en lo que consumes.
Los dioses nos dejaron las instrucciones para tejer y hacer tributo con valiosas mantas, esas mismas las ofrecimos a los visitantes y la corona, cambiaron los rituales, las creencias y los usos, pero seguimos tejiendo el Lienzo de la Tierra® con el que nos identificamos en nuestra comunidad y por el que los visitantes nos reconocen y valoran. En pleno siglo XXI no tiene sentido aislarnos por las razas, géneros, creencias, ni nacionalidad, porque sabemos que las culturas son mestizas, compartidas, entretejidas.